Techno

 El andamiage más hostil,

entre redes sociales y frialdad

mecánica, me ha llevado a encontrarme

alejado, triste, ensombrecido a causa

de mi rostro virtual extra expuesto,

extra dormido. 

Por ello, vamos escatimando los pasos

hacia dónde dirigir la mancha

quemándose. La mancha humana

derritiendo con techno el suelo

donde respiramos. Techno

cuando vibro, a lado tuyo,

para humedecer mis piernas

junto al Dj que nos devora.

Con la música delirante afrontamos

el duro camino para des-plantar la violencia,

el des-ordén a pasos ensoñadores existe menos.

Escucho con claridad este ritmo indetectable,

-¿no escuchas tú cómo dirige al fin?

El antropoceno me parte

múltiple, estallando en los cerros

y destronchando mis visceras gemelas

a tu sueño. Un espejo nos parte

a todxs columpiádonos en la pista.

Salimos del salón___se escucha al mismo latido,

aún

corazón aprensivo,

en el piso

como mi crisol de la noche muerta. 

Es mañana cuando figura

el sol oscuro del olvido todavía 

izado, talante, dispuesto, vivo

amador

económico de mi putrefacción. Asimismo, 

sus rayos de luz son tormentas que sugieren partir. 

Deshidratado, las imágenes del ardor surcan 

dentro mío. 

La economía busca mi hambre y, 

retorcida, como angustia se funde 

en la prístina

sensación del agua penetrando 

tierra seca. Escucho risas. El mundo

bailaba a su alrededor, 

acompasando rosas, ríos, hielo, magma. 

Del techno de ayer, sólo locura

advierten los comerciantes

con este almuerzo. Saturado, escatológico

todo ser vivo, se pudre 

abrazando un

proceso del fin.

Y ¿dónde termina mi cuerpo

habitado?

Frío siento, por unas lágrimas

que no pueden esquivar las balas

del día. 

Y me duermen, ahogando 

la píldora de éxtasis.